lunes, 13 de abril de 2015

Hora de aventuras (2010-)

"Estás solo, chico. Sólo hay oscuridad para ti, y muerte para los tuyos. Estos ancestros son sólo el principio. Comandaré un gran y devastador ejército, y marcharemos sobre millones de mundos. Marcharemos hasta que toda luz haya sido extinguida. Eres fuerte, chico, pero yo estoy más allá de toda fuerza. Yo soy el final de todo, y he venido a por ti, Finn."


Coge a tus amigos y vámonos, que se vienen SPOILERS a mansalva.

Cuando eres muy friki y te gusta tanto una serie que a veces te hace replantearte un poco el mundo, o tienes un problema o la serie en cuestión es increíblemente buena. Este raruno fenómeno se ha dado en mi cabecita con tres casos muy especiales: Breaking Bad, Juego de Tronos (la serie, que no los libros. Valiente y puñetero tostón) y esta maravilla que lleva ya cinco años en antena, seis temporadas a sus espaldas y una legión de fans que, a estas alturas, empiezan a plantearse si Hora de Aventuras ya no es lo mismo, si ha perdido ese misticismo y ese toque de genialidad, humor infantil y adulto y surrealismo que la han convertido en un fenómeno de masas que disfrutan seres humanos de todas las edades.

Puesto al día con la serie y seguidor incondicional, lo cierto es que algunas de estas "quejas" me parecen tener poco o ningún fundamento. Que si hay tramas que deberían desarrollarse más, que si Finn habría molado más estando manco, que si queremos que vuelvan a juntar a Finn y a la Princesa Llama, que si deberían desarrollar más la historia de Simon Petrikoff... Está claro que a la gente le das la mano y te piden el brazo y las extremidades si es necesario, porque hay muchas preguntas que aún no tienen respuesta en la tierra de Ooo, y de aquí al final de la sexta temporada tiene pinta de que vamos a pasárnoslo MUY bien... siempre y cuando tengamos paciencia y aceptemos el rumbo de los acontecimientos. ¿U os pagan a vosotros por escribir guiones, chismosillos míos?


Para empezar, lo suyo es ponerse en situación y analizar cómo les ha ido a nuestros personajes favoritos durante este lustro. Y como son un petate, me quedo con los más importantes y con alguno al que le tengo especial cariño:


Finn


Ahora mismo con una edad que rondará entre los 16 y 17 años, el protagonista de la serie ha vivido de todo: diversos enfrentamientos con el temible Lich, viajar a una realidad alternativa (en la que es manco, tiene familia y Jake es un perro común), la muerte de su héroe y modelo a seguir, Billy, la obtención de varias espadas (a cada cual más chula), perder su miedo al océano, descubrir que su padre biológico es un desecho humano y perder su brazo en un intento por querer hablar con él y posteriormente recuperarlo (en un episodio que... en fin. Luego dirán que la serie es apta para la infancia). Ah, y desamores. Muchos desamores. Primero con la Princesa Chicle y después, de forma más profunda, con su gran amor, la Princesa Llama, con la que inició una relación que acabó de forma abrupta por culpa del extraño fetiche de nuestro héroe de ver a su chica dándole una somanta de palos al pobre Simon. Si es que...


Jake

"¡Síiiiiiiiiii! Ser padre de familia es un rollo."

¿Os imaginabais a Jake al principio de la serie siendo papá? Bueno, lo cierto es que, a pesar de haber tenido una cuca camada con Lady Arcoiris, el mejor amigo de Finn pronto abandonó sus funciones progenitoras, ya que sus pequeños llegaron a la edad adulta en un santiamén (that happens). Además, pudimos saber algo más de sus orígenes y extraños poderes, formó una gran amistad con el ser interdimensional Prismo y ha estado apoyando a Finn en todos y cada uno de sus tropiezos, vivencias y aventuras. 


Rey Hielo


Pasó de caernos simpático por hacer de villano achuchable e inocente a ser uno de los personajes más queridos de la serie. En la tercera temporada descubrimos sus orígenes como ser humano de nombre Simon Petrikoff, al final de la cuarta su relación con Marceline (brillante giro e historia, por otra parte) y, hacia el final de la quinta, asistimos a un mínimo atisbo de consciencia cuando un ser de pura antimagia, Belanoche, le quitó sus poderes durante un corto periodo de tiempo y le devolvió a su forma humana, cosa que aprovechó para despedirse definitivamente de su amor en el pasado, Betty, mediante un complejo y emocionante proceso en el que ayudaron Finn, Jake y especialmente Marceline. Pero Betty saltó la barrera del tiempo, salvando a Simon de morir sin su corona y derrotando a Belanoche. El paradero de la buena muchacha es ahora un misterio, pero se sabe que sigue en Ooo, buscando una fórmula para conseguir acabar con la maldición de Simon. Como el Rey Hielo, el hombre sigue sin tener mucha suerte con las princesas, ya que sus métodos no es que sean precisamente muy ortodoxos, pero a cambio los guionistas han buscado hurgar más en su personalidad, sus miedos y pensamientos, y en alejarle aunque sea un poco de esa fachada de perturbado y pervertido mago de hielo.


Marceline


Reina de los vampiros y mejor amiga de Finn y Jake, Marceline y su bajo-hacha molan demasiado. Y ahora aún más cuando descubrimos su pasado en la Guerra de los Champiñones, sus vivencias con Simon y el gran cariño que siente hacia él y, por qué no nombrarlo, su actitud de amor-odio con la Princesa Chicle, con la que, según confirmó su actriz de doblaje, Olivia Olson, tuvo una RELACIÓN EN EL MÁS AMPLIO SENTIDO DE LA PALABRA. Una pena que nunca vayamos a verla, pues Pendleton Ward admitió que la serie se emite en países donde la homosexualidad está castigada con severas penas, y mostrar tal cosa acarraería más de un problema desagradable. Lástima lastimera, aunque, tratándose del equipo de Ward, nunca digáis nunca...


Princesa Chicle


Al principio parecía un ser sabio, recto y hasta mono que velaba por la paz en el mundo. Ahora, todo el mundo la odia. Y lo cierto es que su personaje ha experimentado un cambio brusco en el que se han visto varias facetas que le han hecho perder puntos: su obsesión por el control, frialdad, desprecio sin razón aparente y actitud premeditada y calculadora (que se lo digan a la Princesa Llama) la han convertido en blanco de todas las iras. En el fondo, yo creo que es una buena persona, pero muy en el fondo. Igual que pienso que Marceline tuvo buenas razones para mandarla a tomar por saco, y tal. En el transcurso de los acontecimientos, el Lich no la mandó al otro barrio de milagro, disfrutó de una apariencia más joven durante un único capítulo, rompió el corazón de Finn, descubrimos que eso de que tiene 18 años ya no se lo cree nadie (tiene chorrocientos, como demostró el episodio "The Vault"), guarda una camiseta de Marceline en su armario y tiene una sala secreta desde la cual controla todo lo que sucede en Ooo. 


Princesa Llama

"¿Por qué todo junto se escribe separado, y separado se escribe todo junto?"

Apareció al final de la tercera temporada, y Finn y ella comenzaron una relación que a todos nos pareció muy cuca, pero que estaba claro que no acabaría bien. Ahora, tras derrotar a su malvado padre, es oficialmente la Reina Llama y tiene a Don Polvorón de paje real, porque sí. 


Conde de Limonagrio

Cuando alguien te dice que el PP ha salvado a España del desastre y que lo vas a votar orgulloso en las autonómicas.

Protagonista de episodios que te puedes saltar, sus gritos eran al principio el descojone, pero ahora molestan cosa mala. Tras enfrentarse a la Princesa Chicle por el trono de Chuchelandia, consiguió formar su propio reino, con sus propios súbditos y hasta familia. Pero ya os digo que no es que sea muy ducho gobernando...


Mayordomo Menta


Misterio y más misterio es lo que ofrece el segundo de a bordo de la Princesa Chicle. Eso y que tiene un don especial para la magia negra. Yo no le quitaría el ojo de encima.


Susana la Fuerte



Su última aparición dejó más preguntas que respuestas, pero al menos acabó con el gran debate. ¿Es humana o mutante? Pues ni la una ni la otra, es un cyborg de orígenes desconocidos que sigue guiando a su errante pueblo por las catacumbas de la tierra y que promete dar que hablar en el futuro.


Princesa del Espacio Bultos

Pues eso.

Ha tenido más de un desamor y vivido locas aventuras con Finn y Jake, aunque hace tiempo que no sabemos de ella. Su última aparición fue en "Breezy", ese episodio que Boing, vista su política de censura, no debería emitir, y donde se nos deja en el aire si tuvo "algo" con Finn antes de que este recuperase el brazo. Por el bien de la Humanidad, rogamos por que NO.


Trompi


Tras varias aventuras con Finn y Jake, acabó sentando la cabeza y casándose con el Señor Cerdo. Aunque para cerdada sus besuqueos...


BMO

¿No es la cosa más adorable que hayáis visto en vuestra miserable vida?

BMO, aun queriendo experimentar algún día lo que se siente como un auténtico ser vivo, es feliz y disfruta de la vida a su manera, ya sea haciendo amigos imaginarios o como consola particular de nuestros protagonistas. Fue creado por Moe, un hombre con una edad aproximada de 1000 años que, para subsistir, se convirtió a si mismo en cyborg. BMO habría sido concebido como experimento de diversión y cuidado del hijo de Moe, pero este último nunca llegó a formar una familia. 


El Lich


Tras tres intentos por acabar con nuestros héroes yéndose al garete, el Lich (con la increíble y acojonante voz de Ron Perlman) se ha convertido, accidentalmente, en un gigantesco bebé de afable corazón que vive en casa de Trompi y el Señor Cerdo. Sabemos también, gracias a un episodazo de nombre "Evergreen", que su maldad llegó del espacio y habría sido responsable de la extinción de los dinosaurios. Mejor no sacarle de sus casillas a no ser que quieras que te pase algo como esto:



Quizás la grandeza de esta última temporada es que, vistas las quejas del gentío, los guionistas nos están ofreciendo más respuestas de lo habitual. Mediante el descubrimiento de los orígenes del Lich y de la Corona del Rey Hielo o gracias a la aparición del padre de Finn, personaje repelente y sin un solo atisbo de sentimientos, que tarde o temprano acabará destapando la caja de los truenos. Y eso no es todo, porque en el horizonte se atisba una miniserie que se centrará en el pasado de Marceline, conoceremos al hermano de Jake (Joshua) y, como es habitual, el final de temporada promete dejarnos el culo aún más apretado. Pero nos falta paciencia, como ya he dicho.

Porque entre los episodios que se centran en el bizarrismo y surrealismo habituales del show, también recientemente también hemos disfrutado de obras maestras, como "Food Chain", escrito, dibujado y dirigido por Masaaki Yuasa; "Jake the Brick", que sigue la línea del magistral "Thank you"; el revolucionario y original "A Glitch is a Glitch"; o "Astral Plane", uno de los más recientes capítulos y que tenéis que ver obligados si os gusta de verdad la serie. 


A lo largo de las temporadas, no pudimos llegar a tomarnos la serie mínimamente en serio hasta el final de la segunda. Ya nos intuíamos el trasfondo post-nuclear, pero lo cierto es que, a medida que el programa ha ido avanzando, algunos giros de guion han sido demasiado buenos para ser verdad, dotando a Hora de Aventuras de un aura de culto y de aplauso generalizado más allá de su propio contexto humorístico. 

Además, los personajes, tanto principales como secundarios, han disfrutado de un desarrollo y madurez progresivos. Finn ya no es el mismo joven descarado y despreocupado de las primeras temporadas, llegando al punto de entablar los problemas desde una óptica más adulta. Eso por no hablar de Marceline, el Rey Hielo o Chicle, que han sufrido bruscas variaciones y que parecen, si no irreconocibles en sus roles, sí mínimamente cambiados y en busca de nuevas experiencias.



Para rematar la cosa, las temporadas han ido a mejor en cuanto a guiones, sensaciones y contenido. Lo que comenzó siendo una mera diversión despreocupada obra de unos tipos bastante peculiares (y a los que podría acusarse de drogarse con sustancias aún no tipificadas, visto lo visto en algunos episodios) ahora parece querer buscar una dirección de mínima seriedad dentro de su incontrolable surrealismo, con resultados bastante exitosos y dignos de halago. No obstante, los fans rememoran las primeras temporadas y echan de menos el genial sinsentido general, sustituido ahora por otro menos explícito, pero que funciona realmente bien a la hora de la verdad, con algunos episodios espectaculares que dejan al espectador a cuadros y con más preguntas que respuestas. Respuestas, además, que tardan en llegar, pero que siempre sorprenden positivamente.

Más allá de esto, lo cierto es que la sensación general quizás puede denotar un mínimo, pero no apreciable bajón. Diría, más bien, que la serie ha optado por mantenerse plácida y dejarnos tranquilos sin giros repentinos o que llamen la atención durante un tiempo. El último y más espectacular fue en "Evergreen", en esta última temporada, y aparte de eso la cosa no se ha caldeado demasiado. Y eso es lo que reclaman muchos, que observan que los episodios "casuales" ya no desprenden la maestría y originalidad de las primeras temporadas y que reclaman un cambio total en la concepción del show.

No nos podemos engañar en una cosa; el hecho de que Pendleton Ward ya no sea la cabeza visible de la serie (legó la producción ejecutiva a Adam Muto) se ha notado en ciertos aspectos, como un abuso más fehaciente y, por momentos, ridículo del absurdo (dentro de la seriedad ya comentada), hasta un punto que a algunos les ha parecido molesto. Pero eso no es todo. Muchos talentos del equipo (como Rebecca Sugar) han abandonado la serie o la han dejado en un segundo plano centrándose en la prometedora Steven Universe, que ha atrapado a la audiencia por querer contar una historia con hechos demostrados, grandes personajes y buen desarrollo. O lo que es lo mismo: muchos se han cansado de esperar y se han enganchado a la fresca llamada de la novedad. ¿Significa eso, pues, que Hora de Aventuras está en declive?


Las razones más importantes para negar tamaña falacia residen en que la mística y encanto de la serie (es decir, su mundo, sus constantes, sentido del humor y toque post-apocalíptico) no han desaparecido, ni lo harán. Y si bien es cierto que una buena cantidad de grandes guionistas han dejado el proyecto, los que se han quedado no son precisamente unos peones. Adam Muto ha sido responsable de muchos grandes episodios de las primeras cuatro temporadas, siguen por ahí Jack Pendarvis y Kent Osborne y Ward, a pesar de no ser el "jefazo" absoluto de su propia creación, sigue colaborando en storyboards y en el guion de diversos episodios (además de ponerle voz a la Princesa del Espacio Bultos). 

Así pues, dentro de la incoherencia sigue residiendo la coherencia, y dentro de la locura siempre hay atisbo para las mejores aventuras. Quizás no tan geniales como en sus primeros días, pero igual de tiernas, accesibles y con ese punto de humor característico que, ya sea mejor o peor, está en la serie desde su episodio piloto. Y eso por no hablar de las grandes sorpresas en un futuro no muy lejano, que harán las delicias de los fans.


De modo que no, eso del declive es un cuento chino y el mundo de Ooo puede respirar tranquilo, porque sigue destilando calidad y buen hacer en cada capítulo. Cierto es que con ciertos bajones de cuando en cuando, pero siempre sabiendo cuándo levantarse y haciéndolo de la mejor forma posible. Como ha hecho siempre, a decir verdad, dándonos razones probadas para seguir con ahínco los quehaceres de Finn Murtons (¡tiene apellido!) y demás seres vivos de la Tierra post-nuclear.

Yo, por lo menos, confío en el equipo de Muto. Que me acaben decepcionando ya será otro cantar pero, hasta ahora, cada nuevo episodio sigue siendo un enorme disfrute para mis sentidos arácnidos, humanoides y reptilianos. Y estoy seguro que para los de mucha gente con buen gusto, porque Hora de Aventuras fue, es y seguirá siendo una genialidad durante mucho tiempo. 




P.D.: para fanáticos empedernidos/enfermos/carapanes: dejaos de fanfics, fandoms y cosas nazis. La serie será lo que los guionistas quieran que sea, para bien o para mal. Aceptadlo y viviréis mejor, que es un puñetero dibujo animado.

P.D. 2: no he querido comentar nada del doblaje en nuestro idioma, pero haré un breve e instructivo comentario: mola... hasta cierto punto. Quiero decir, tengo claro que el añadido de palabras como "tron", "matemático", "algebraico" y demás se agradece, porque dan a la serie un toque único que sólo nosotros podemos disfrutar. Eso y un elenco de voces bastante notable (lástima que acaben repitiéndose) otorgan lustre a nuestra versión.  Lo malo viene cuando se cambian diversas palabras del original por querer poner nuestra "coletilla" o, caso sangrante, cuando se censura porque sí. Estoy hasta las narices de que Boing venda una serie como esta como algo chupi guay destinado a la más tierna infancia y luego prive a los fans de la serie de grandes momentos porque les parecen "poco apropiados para la audiencia". ¿Solución? Visionar la serie en su idioma original. Aprendes inglés, disfrutas de voces magistrales (Tom Kenny, Jeremy Shada, John Di Maggio o Ron Perlman) y no te pierdes nada del producto. O eso, o vértela en castellano con los añadidos no censurados en su correspondiente versión original. 

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2 comentarios:

  1. Bastante de acuerdo en todo o casi todo. Con lo del doblaje sabe usted que yo saltaba del español al inglés cuando me era menester (estaba en español con los añadidos censurados en inglés, luego me pasé al inglés, volví al español, otra vez al inglés... beh, como me pillara), porque creo que cada doblaje tiene sus virtudes y sus fallos y que están al mismo nivel.

    En cuanto al tema del declive... qué quieres, dado que vi la mitad de la primera temporada a finales del pasado año, que luego me vi en menos de una semana lo que me restaba de esa y la segunda, y que en otras dos semanas me puse completamente al día (ahora ya en Semana Santa), pues a lo mejor no soy el más adecuado para opinar, pero el rumbo de la serie me ha parecido maravilloso. De hecho, creo que alguno de los momentos más interesantes desde el punto de vista artístico y narrativo, y de lejos más logrados de toda la serie, como pueda ser ese pasado de Simon o la trama "espacial" del Lich y Prismo, no han llegado hasta las últimas temporadas. Y para mí sin mucha pérdida del encanto de las primeras.

    Y eso... que en general de acuerdo con todo. Lo de Betty, dicho sea, me pareció un puntazo brutal, con el cómo tiran de teoría del tiempo circular retroalimentado paradójico; y con lo de Billy (y ese último capítulo donde aparece, con Finn enfrentado al océano) aún se me caen los lagrimones. Ah, y he de reconocer que aunque al principio sí, no soporto demasiado a PEB. Lo siento.

    Fantástica serie, y una crítica de matrícula de honor, caribú ;) ¡Algrebraico!

    P.D: en cuanto a la sala de vigilancia de Chicle... ejem... ejem...

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  2. Una serie tan maravillosa no se merecía otra crítica, la verdad. Me siento feliz por haberte enganchado a este fenómeno tan cojonudamente genial, jefe Oblii Por cierto, se vienen nuevos episodios en breve, que comentaremos debidamente. ¡Gracias por compartir y dar tus impresiones! ;)

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